Bienvenidos a Fotoartis

Este blog nació en octubre de 2007 para aprobar una asignatura. Entonces Fotoartis era un espacio dedicado a la fotografía en general, y muy especialmente a la fotografía artística.
Pero ahora Fotoartis entra en una nueva etapa. Ahora será un blog personal, aunque mantendrá el nombre porque le he cogido cariño.

BIENVENIDOS TODOS. RAY COY.

miércoles, 30 de enero de 2008

La contemplación del dolor

Supongo que habréis escuchado más de una vez que estamos inmunizados ante el dolor, que de tanto exponernos a imágenes violentas ya no nos conmovemos. En general estaría de acuerdo con esta afirmación porque soy capaz de ver en los informativos de televisión imágenes de un atentado terrorista en Iraq, con sus correspondientes miembros amputados dispersados por el suelo, y que no se me indigeste el plato de pasta. Pero hay un tipo de imágenes que me siguen provocando un pellizco, una punzada que me deja absorta, mirando y reflexionando sobre lo que veo. Me refiero a las fotografías.
Creo que una fotografía impacta más que una imagen en movimiento porque tienes todo el tiempo del mundo para observarla, mirarla y remirarla. Una imagen en movimiento, por lo general, es caduca, la ves, pasa, y normalmente no la vuelves a ver.
Pensé en todo esto al reencontrarme con una fotografía que recorté de un dominical hace cuatro años: suelo recortar y “archivar” cosas que me gustan o me interesan y que encuentro en periódicos o revistas (lo de “archivar” en realidad quiere decir que guardo las cosas dentro de mi desorden, pero a pesar del caos aparente después las suelo encontrar). Me he reencontrado con la fotografía revisando los archivos de mi ordenador porque en Primero de carrera la usé para el trabajo final de Teoría de la Imagen.
La fotografía fue publicada en el dominical Magazine, que regala el Diario de Sevilla pero que en realidad es el semanal de La Vanguardia. La imagen pertenecía a un reportaje del periodista Bru Rovira titulado «Congo, la guerra silenciada».
Gracias a este blog he descubierto que Internet no es un cajón lleno de conocimiento donde encuentras todo lo que buscas, al menos en lo que a fotografía se refiere. Y es que no encontraba el recorte por mi casa y buscaba información en Internet y aunque hallé referencias al reportaje, no aparecían ni el texto ni la fotografía. En mi ordenador sólo conservaba la fotografía pero necesitaba el original para releer el texto. Por fin apareció el recorte metido en un sobre. Ya sabía yo que no lo había perdido... Conozco mi caos.
Volviendo a la fotografía de la que os hablaba, el único protagonista es un niño pequeño que mira a cámara tumbado. El plano deja al descubierto parte de su cuerpo, aparentemente quemado. En realidad no son quemaduras sino las consecuencias de la desnutrición que sufre. El breve texto que aparece junto a la fotografía explica que el niño pasó meses escondido en la selva congoleña hasta que llegó al hospital de Kongolo donde fue atendido por la ONG Médicos Sin Fronteras.
Un tiempo después de ver por primera vez esta fotografía, me di cuenta de que el niño salía en un anuncio televisivo de la ONG. Las imágenes del anuncio y la fotografía fueron tomadas a la vez, cuando el niño era atendido en el hospital. Me impresionó mucho verlo.
Ni una edad ni un nombre, sólo sé de él que es congoleño. O era, porque viendo las condiciones en las que llegó al hospital, es más que probable que muriese.
Desconozco lo que fue de este niño pero su mirada sigue conmoviéndome. Sus ojos tristes me siguen dejando un vacío en el pecho...

Bru Rovira (Congo, 2003)

1 comentario:

Principito Desencantado dijo...

Es triste ver como muchas de estas fotos predominan día sí y día también en cada periódico.

Besitos.